Entrevista a Ana Folch, Presidenta de Cambiadores Inclusivos

En 1930, cuando un periodista le preguntó a Albert Einstein sobre si creía verdaderamente en su teoría sobre la relatividad, éste respondió que “la única cosa realmente valiosa es la intuición”. Tenía plena seguridad de que sus estudios eran ciertos, lo “intuía”. Su personalidad y esa confianza auténtica en su trabajo es un gran ejemplo del sexto sentido.

A veces, no necesitamos ver y tocar una cosa para creer en ella. Nadie nos tiene que demostrar, por ejemplo, que el camino que tomamos es el acertado si así lo sentimos. Tampoco hemos de consultar una biblioteca entera para saber que la amamos y que somos amados. Nos lo dice el corazón. Nos lo dice la intuición.

Esta es nuestra presidenta, esta es Ana Folch.

¿Cómo te definirías como persona?

Pues no estoy muy segura. Cada día es diferente y, en consecuencia, cada día tengo diferentes puntos de vista, diferentes emociones y diferentes planteamientos ante una misma situación. Creo en la relatividad de las cosas y en las variables.

Lo que considero importante es la capacidad de reír y el buen humor. Entiendo que la risa y el buen humor, es importante en nuestras vidas, tanto a nivel personal como profesional, por ello, intento divertirme y reír lo máximo que pueda. 

Soy una persona inteligente, tolerante, simpática, alta, positiva, sensible, curiosa, activa, autosuficiente, empática, luchadora, sociable, tozuda, impulsiva, miope, autoritaria, enérgica, soñadora, original, solidaria, orgullosa, tímida, valiente, amable, acogedora, cariñosa, difícil, morena, egoísta, tolerante, gorda, respetuosa, melancólica, perezosa, justa, dominante, agresiva, camaleónica, anticapacitista y finalmente intentando ser consecuente con mis ideales.

¿Qué perfil profesional tienes?

Al principio de mi vida laboral, me dediqué a las ventas y a la gestión comercial, cosa que no me gustaba nada, pero me decían que valía para tratar a la gente y para vender diferentes productos, por lo que trabajé unos años como agente comercial. 

Esos años, los compartí con la organización de eventos y actos, como azafata de protocolo; y finalmente empecé a dejarme llevar por mis inquietudes humanas y por la curiosidad. Necesitaba hacer algo por los demás y por el mundo, y pase del voluntariado en diversas ONGs, a la situación actual.

En estos momentos mi perfil profesional me lo ha dado mi experiencia laboral, después de haber estado 25 años al lado de uno de los profesionales en materia de accesibilidad, más importantes de nuestro país. 

Me considero una humilde conocedora en materia de Accesibilidad, que aprende cada día un poco más.

¿A qué te dedicas ahora mismo?

En estos momentos, me estoy planteando la vida desde una vertiente más relajada. Empecé a trabajar de joven, y ya han pasado más de 40, por lo que me siento ligeramente cansada. Estoy dejando mi trabajo para dedicarme a mi misma, a Cambiadores Inclusivos, así como a ser la colaboradora del profesor Rovira-Beleta, en sus cursos de formación.

¿Cuáles son tus motivaciones y sueños?

Reír, ser feliz, y hacer un mundo más justo.

¿Qué te sugiere la palabra accesibilidad?

La accesibilidad forma parte de la vida, de nuestro trabajo, nuestras relaciones, nuestras ideas, nuestro pasado y de nuestro futuro.

A veces, la ignoramos, la olvidamos, pero en el fondo, está presente en todo lo que hacemos. Lo que pasa, es que la mayoría de la gente no sabe ni que existe. La accesibilidad es intrínseca a la vida.

Porque la accesibilidad, es imprescindible para cualquier persona, sea como sea, la accesibilidad la necesitamos y la utilizamos, aunque no lo sepamos o no seamos conscientes de ello.

¿Qué importancia tiene (la accesibilidad) en tu vida y en tu día a día?

Es imprescindible para poder tener una buena calidad de vida, unas inquietudes personales y unos ingresos económicos familiares.

¿Qué te motivó a trabajar en este sector?

Siempre he tenido curiosidad por las cosas diferentes, cuanto más diferentes, mejor!

Me atrae todo lo que habitualmente no se considera “normal”, (aunque realmente no haya nada “normal”). 

Pienso que en la diferencia está la normalidad; y por eso, me he dedicado a defender diferentes causas.

Empecé de adolescente, en los 70, cuando mi madre, (por su devoción católica), me hacía ir los sábados por la mañana, a “ayudar” al Cottolengo del Padre Alegre, Institución que en la época “cuidaba de las personas enfermas y ayudaba a los pobres”.

Llegaron los 80, se me partió el corazón, y muchas personas queridas se quedaron en el camino, con la pandemia del VIH/SIDA. Me convertí en una gran activista, por los derechos de las personas VIH+. Actualmente sigo colaborando con mis compañeras de lucha, pues todavía quedan muchas cosas por hacer al respecto en esta temática.

En la vida, una cosa te lleva a la otra y por ello, empecé a defender la Muerte Digna. Muchas compañías en los hospitales, muchos silencios, muchas personas que defender y muchos sentimientos encontrados cuando finalmente llega el descanso a todas esas personas.

En los 90, conocí a un hombre con movilidad reducida. Y con mucha curiosidad, “me lancé” y quise descubrir a esa persona y ese mundo. Desde entonces hemos trabajado, caminado y compartido juntos, la accesibilidad y diseño universal…….Quizás en un determinado momento, se pueda decir que he tenido un “lio” con mi jefe!!

Esta trayectoria, me ha llevado finalmente a Cambiadores Inclusivos.

¿Qué te motiva de trabajar/ colaborar con cambiadores inclusivos?

Por un lado, es una cuestión personal, desde el amor, la fidelidad y desde la admiración hacia una gran persona, que, en un determinado momento importante de mi vida, me pidió acompañarla en esta trayectoria…….hasta entonces, yo había sido siempre la “mujer invisible”.

Para mí es importante ser leal con los amigos, y por ello, acepté participar en este proyecto. 

La amistad es poder compartir, emprender, avanzar y crear momentos y acciones con personas queridas. La amistad es la mejor relación de afecto que pueda existir entre dos seres humanos, es imprescindible entre las relaciones, y es generosa y desinteresada. 

La amistad es lo único que puedes libremente elegir y sentir, sin condicionantes. Es cuestión de piel. 

Y a esa persona, lo único que puedo decirle es: Gracias por valorarme para ello!!!

Por otro lado, Cambiadores Inclusivos, es una necesidad no cubierta en nuestra sociedad. Hay personas marginadas, por no poder ir al baño en espacios públicos. Hay personas que no pueden salir de su casa más de 2 horas seguidas, por no poder cambiarse. Hay un montón de personas que necesitan de asistencia personal y de estos Cambiadores. Hay un gran número de personas que socialmente no están incluidas, por no poder cubrir sus necesidades más básicas. Hay muchas personas discriminadas, marginadas, y excluidas de nuestra sociedad; y eso no se puede permitir. Es una cuestión de ética, de moral y de justicia social.

¿Qué valor/valores crees que aportas tú al proyecto?

La gran experiencia de la diversidad generacional.

¿Qué aprendizajes destacarías de los que has tenido al estar trabajando en este proyecto?

He aprendido lo que es la democracia, la cooperación, la colaboración y la igualdad de oportunidades. He aprendido a tener más paciencia, a preguntar, a consensuar y a compartir.

¿Cómo te ves dentro de 5 años?

No sabría qué decir porque intento vivir más al día. No quiero mirar mucho al pasado ni al futuro. Hay que vivir al día, cada minuto, cada segundo cuenta.

En relación de Cambiadores Inclusivos, espero que hayamos creado “Cambiadores Inclusivos Iberoamérica”, y que nos juntemos desde varios países, por una causa común.

Espero poder acompañar a todas esas gentes de todos esos países que quieran implementar en sus territorios, esta iniciativa, recordando a Nicholas Murray Butler, que decía: “Hay tres grupos de personas: los que hacen que las cosas pasen, los que miran las cosas que pasan y los que se preguntan qué pasó”; seamos nosotras de las que hacen que pasen las cosas!!

Hemos visto que, apuestas por la accesibilidad desapercibida, ¿podrías explicar en qué consiste?

Literalmente y según su creador, “El objetivo del concepto accesibilidad desapercibida es simplificar la vida de todos, haciendo que los productos, las comunicaciones y el entorno sean más útiles para un mayor número de personas, con un coste adicional bajo o nulo, y un diseño habitual y normalizado”.

Esta filosofía, es interesante en el momento de aplicarla en nuestro entorno, a nuestros productos y en nuestros diseños. Es una cuestión básicamente de estética en el diseño.

Eso no quiere decir, que, en ciertas ocasiones, esa accesibilidad sea “sobre apercibida” porque las situaciones así lo necesitan.

Una cosa no está reñida con la otra.

Creo que es importante aplicar el sentido común, para saber cuándo, cómo y dónde se debe de aplicar un criterio u el otro.

¿Por qué un Postgrado en Accesibilidad y Diseño Universal?

La formación es imprescindible para que la sociedad avance. 

Este año celebramos una década de este curso, en el cual, ayudo al profesor Rovira-Beleta, que es el director de este Postgrado en la School of Architecture de la UIC Barcelona; a gestionar los contenidos docentes y a coordinar a los participantes.

Hay que hacer pensar a las personas, hay que dialogar, fomentar la participación, y el debate. Hay que acompañar a todas esas personas que quieren tener un mundo mejor, y aprender sobre Diseño Universal, sobre inclusión, y sobre participación de todas las personas en la sociedad.

Una vez, alguien muy querido me dijo, que la mejor manera de aprender es sintiéndolo, y desde entonces, es lo que intento aplicar a los participantes del curso. Hay que vivir y sentir la diversidad, para poder “verla”.